Ruta en moto: La “puerta de América”  

Quienes acudan al circuito de Jerez para presenciar el Gran Premio de España de MotoGP tienen la oportunidad de planificar su viaje para organizar alguna ruta en moto por la zona. En esta ocasión os proponemos un recorrido de 280 kilómetros, entre Jerez y Palos de la Frontera.

Inaugurado en 1985, el Circuito de Jerez no tardó en convertirse en una de las pistas más famosas de Europa gracias al Gran Premio de España de motociclismo, que, desde 1987, congrega a miles de aficionados en las instalaciones del trazado gaditano. Motoristas que, además de las carreras, disfrutan de la hospitalidad y los atractivos turísticos que les brindan localidades como la propia Jerez de la Frontera o las cercanas El Puerto de Santa María y Sanlúcar de Barrameda.

Pero estas poblaciones, visitadas masivamente durante un fin de semana, bien merecen ser conocidas de forma más pausada. Y, de paso, elegirlas como punto de partida de una ruta en moto que posibilita descubrir la mayor de las aventuras de ultramar: el descubrimiento de América. Arrancamos…

Inicio de la ruta en moto: Jerez de la Frontera

Iniciando la ruta en moto en Jerez, recomendamos sacar un rato para pasear por la ciudad, una de las más representativas de Andalucía, y visitar sus numerosos palacios, el Conjunto Monumental del Alcázar y Cámara Oscura, la Cartuja Santa María de la Defensión, la catedral de San Salvador, las iglesias de Santiago y San Miguel, la Fundación Real Escuela Andaluza del Arte Ecuestre –popularmente conocida por su exhibición “Cómo bailan los caballos andaluces”– o las bodegas adscritas a la Ruta del Vino y el Brandy Marco de Jerez.

Y para quienes deseen tener un recuerdo más motero, en la avenida Alcalde Álvaro Domecq se encuentra el Paseo de la Fama, impulsado con motivo de la designación de Jerez de la Frontera como Capital Mundial del Motociclismo. A imagen y semejanza de Los Ángeles (EEUU), en la localidad gaditana se han colocado estrellas que rinden tributo a personalidades que han hecho historia en el mundo de las dos ruedas como Ángel Nieto, Giacomo Agostini, Jorge Martínez “Aspar”, Carlos Checa, Jorge Lorenzo, Valentino Rossi o Kevin Schwantz.

Rumbo a Cádiz

Después de disfrutar de Jerez de la Frontera, nos subimos a la moto para poner rumbo a nuestro primer destino: Cádiz. Entre los distintos itinerarios que conducen a la conocida como “Tacita de Plata”, el más corto, de 36 kilómetros, se inicia en la carretera A-480, prosigue por la autovía A-4 y continúa por las carreteras CA-32 y N-443.

La capital gaditana forma parte de la historia de la conquista de América. En 1493, Cristóbal Colón partió del puerto de Cádiz, al mando de 17 navíos y 1.200 hombres, en el que fue el segundo viaje al Nuevo Mundo. Una escena que volvió a repetirse en 1502 con el que sería el cuarto y último viaje colombino.

Considerada la ciudad más antigua de Occidente, Cádiz se caracteriza por su inconfundible aire marinero y el sentido del humor de sus habitantes –buena muestra de ello son las chirigotas, comparsas, coros y cuartetos que participan en el Carnaval de Cádiz–. Y entre sus encantos figuran playas como la de la Caleta, en uno de cuyos extremos se ubica el castillo de San Sebastián, escenario elegido para el rodaje de la película “El capitán Alatriste”, basada en la obra literaria de Arturo Pérez-Reverte.

Sanlúcar de Barrameda

Deshaciendo el camino, regresamos a Jerez de la Frontera, donde se debe tomar la autovía A-480 y, a continuación, la carretera CA-524 que permite llegar a otra población de inequívoco aire motero: Sanlúcar de Barrameda. Y también marinero, como lo demuestra el que su puerto fuese testigo, en 1498, de la tercera partida de Colón a América.

Situada frente al Parque Nacional de Doñana, en la margen izquierda de la desembocadura del Guadalquivir, Sanlúcar de Barrameda tiene su origen en la época musulmana y se extiende, a través de calles estrechas, hacia el río y el océano Atlántico, que, en estado de bajamar, permite que cada mes de agosto se disputen las famosas carreras de caballos, declaradas de Interés Turístico Internacional desde 1997.

Entre los principales reclamos turísticos de Sanlúcar de Barrameda se encuentran el palacio ducal de Medina Sidonia y el castillo de Santiago. Pero además del rico patrimonio histórico-artístico, la localidad es ideal para reponer fuerzas y degustar su riqueza gastronómica, basada tanto en productos del mar –pescados y mariscos– como de la huerta.

Palos de la Frontera

Tras disfrutar de la provincia de Cádiz, la ruta de la puerta de América nos lleva a Palos de la Frontera, ya en tierras onubenses. Este recorrido conviene iniciarlo de buena mañana, ya que la distancia entre Sanlúcar de Barrameda y el punto de destino es de 188 kilómetros.

El mismo ha de iniciarse por la carretera CA-9027 y continuar posteriormente por la SE-9020, cuyo primer kilómetro presenta una sucesión de curvas peligrosas. Es aconsejable hacer un alto en el camino en Los Palacios y Villafranca, para refrescarse y estirar las piernas, y proseguir por las carreteras SE-9023, SE-9024 y SE-3206 antes de tomar la autovía A-4 con dirección a Sevilla. En las proximidades de la capital hispalense se ha de enlazar con la SE-30, en dirección a Huelva, y abandonarla en la salida 15B (San Juan de Aznalfarache).

Después de atravesar Tomares, la autovía A-49 nos conducirá a Gines, donde continuaremos por la A-8076 y la A-472, con algunos tramos en los que se debe extremar la precaución debido a la sucesión de curvas peligrosas. Finalmente, las carreteras A-494, A-5026 y, por último, A-5025 nos permitirán llegar a Palos de la Frontera.

Cuna del Descubrimiento, en la antiguamente denominada Palos de Moguer es de obligada visita la casa-museo de Martín Alonso Pinzón, ilustre marino que financió buena parte de la expedición de Colón. En la actualidad, esta casona del siglo XV está dedicada a la investigación y exposición permanente de la documentación y los objetos relacionados con la familia Pinzón, Palos de la Frontera y el Descubrimiento, además de contar con reproducciones de cartografía y maquetas de barcos.

Igualmente, la estancia en Palos de la Frontera ha de aprovecharse para conocer la iglesia parroquial de San Jorge y la fuente de La Fontanilla, cuya agua, según cuenta la tradición, abasteció a las carabelas colombinas.

Monasterio de Santa María de la Rábida

Pero la ruta de la puerta de América no puede concluirse sin acudir al lugar donde se originó el descubrimiento del continente americano. A cuatro kilómetros de Palos de la Frontera se ubica el monasterio franciscano de Santa María de la Rábida, donde Cristóbal Colón, en compañía de su hijo Diego, encontró el cobijo y la comprensión que no obtuvo en la vecina Portugal.

Desde las ventanas del monasterio se divisa el muelle de las Carabelas, con reproducciones de las embarcaciones “Niña”, “Pinta” y “Santa María” que se construyeron en 1992 para conmemorar el quinto centenario del descubrimiento de América. Un recinto que se ha convertido, además, en escenario para el rodaje de largometrajes como “Juana la Loca” o “Tirante el Blanco”.

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