En los últimos años, AMV ha materializado su compromiso con la seguridad de los motoristas organizando a través de la Fundación AMV jornadas específicas y cursos de conducción segura. Una responsabilidad también plasmada en el Territorio AMV, donde encontrarás interesantes artículos para perfeccionar el manejo de tu moto o scooter, consejos de mantenimiento para que tu vehículo esté siempre a punto, recomendaciones relativas al equipamiento, etc.
Por ello, desde AMV nos alegramos de la puesta en marcha de iniciativas como Formació 3.0, impulsada por el Servei Català de Trànsit de la Generalitat de Catalunya y la Asociación Nacional de Empresas del Sector de Dos Ruedas (Anesdor). Un programa en el que participan centenares de motoristas y que ha permitido identificar los errores más habituales de este colectivo.
Tanto si eres un motorista experto como novel, toma nota de los mismos y recuerda que, en muchas ocasiones, el factor humano es el principal causante de los accidentes de tráfico.
Velocidad inadecuada
La velocidad excesiva o inadecuada es, junto con las distracciones y el alcohol, una de las principales causas de accidente de tráfico debido a que potencia todos los fallos humanos en la conducción. No pienses que es simple teoría o una opinión: los estudios científicos de miles de accidentes así lo corroboran.
Por el contrario, una velocidad adecuada puede ser considerada un factor protector frente a un accidente de tráfico. Y aunque éste llegase a producirse, lo más seguro es que sea de mucha menor gravedad que si hubieras circulado velozmente.
En relación a este tema, te recomendamos leer “La velocidad”, publicación de la Dirección General de Tráfico (DGT) en la que encontrarás interesante información sobre la velocidad excesiva o inadecuada, los tipos de velocidad, las distancias de reacción y de frenado, los efectos negativos de la velocidad sobre el conductor, la velocidad y la toma de curvas y, no menos interesante, la conducción ecológica.
Trazado incorrecto de las curvas
Otro de los errores que suele propiciar un accidente en el colectivo de los motoristas es no saber trazar correctamente las curvas. Este es uno de los temas que se han abordado en los cursos de conducción segura impulsados por AMV y objeto del artículo “Trazada de la curva en moto”.
Recuerda que en las curvas los vehículos se someten a una serie de fuerzas que pueden provocar la salida de la vía. En relación con el apartado anterior –velocidad inadecuada–, si circulas a una velocidad excesiva en una curva, la moto puede volverse inestable y perder la trayectoria.
Además, un exceso de velocidad puede aumentar la posibilidad de que se produzca un derrape y disminuye la capacidad de frenada. Si a ello sumamos un firme en mal estado o deslizante y unos neumáticos desgastados, imagínate el resultado…
Desconocimiento de la técnica de frenado
En los vehículos a motor, pero sobre todo en el caso de las motocicletas y los scooters, suele decirse que tan importante es saber dar gas como frenar. Y, curiosamente, tal y como se constata en los cursos de conducción, no todos los motoristas saben detener correctamente su vehículo o cómo sacarle el mayor partido al sistema de frenada combinada (CBS) o al cada vez más generalizado sistema antibloqueo de frenos (ABS).
Junto al conocimiento de la moto, llegado el momento de “tirar” de frenos conviene tener en cuenta factores como la velocidad, el estado del denominado triángulo de seguridad –conformado por frenos, neumáticos y amortiguadores–, las condiciones de la vía y del entorno, etc.
Utilización del espacio
Sobre todo en ciudad, distintos estudios ponen de manifiesto que entre los malos hábitos de los motoristas se encuentran avanzar posiciones sirviéndose del carril contrario o zigzaguear entre vehículos. Incluso en algunas ciudades donde no está permitido que utilicen el carril bus, hacen uso de esa parte de la calzada.
Si bien es cierto que motos y scooters son una solución idónea para desplazarse –sobre todo en las grandes urbes–, no lo es menos que circular inapropiadamente por los carriles puede dar lugar a un accidente. Como las prisas son malas consejeras, antes de intentar avanzar posiciones en un atasco por el carril contrario o zigzagueando, lo mejor es que te mantengas detrás del vehículo que te precede y que adelantes correctamente y sin riesgo.
Capacidad de anticipación
Conducir un vehículo a motor requiere estar atentos a lo que sucede en nuestro entorno y preparados para sortear cualquier imprevisto. Por ello, la capacidad de anticipación es vital. ¿Has escuchado alguna vez que, sobre todo en carretera, se debe “mirar lejos”?
Si pones en práctica esa capacidad de anticipación, podrás reaccionar de forma correcta ante una situación de riesgo, minimizando así la probabilidad de sufrir un accidente.
Mantenimiento del vehículo
En los artículos de Territorio AMV hacemos especial hincapié en el mantenimiento del vehículo. Para evitar accidentes o quedarte “tirado”, no debes descuidar la puesta a punto de tu “máquina”. Acude de forma periódica a tu concesionario o taller de confianza para que sus profesionales lleven un registro de la moto y te indiquen cuándo es necesario cambiar las pastillas de los frenos o sustituir el aceite.
Y no es necesario que seas un motorista experto para saber si los neumáticos, único nexo de unión entre el vehículo y el asfalto, se encuentran en buen estado. Si aprecias que el dibujo de la banda de rodadura va asemejándose a un “slick” de competición, no te la juegues y cámbialos inmediatamente.
Evita accidentes de moto respetando las normas de tráfico
Por último, otra de las causas que provocan accidentes en moto es no respetar o desconocer las normas de tráfico. No poner en práctica una conducción racional y responsable, así como ignorar la señalización horizontal y vertical, puede acarrear graves consecuencias para el propio motorista y el resto de usuarios de las vías públicas.
En este apartado te recomendamos leer el artículo “Consejos AMV para evitar multas”, ya que una conducción irresponsable, además de mermar la seguridad, puede acarrear sanciones económicas, la retirada de puntos del carnet, la inmovilización del vehículo e incluso el ingreso en prisión.
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