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Si eres de los que usa la motocicleta a diario o muy frecuentemente, es esencial que pongas en práctica una serie de hábitos rutinarios relativos a la revisión de la moto. De esa manera, circularás más seguro y, al tratarse de inspecciones preventivas, podrás acudir a tiempo a un taller de confianza para evitar posibles averías, quedarte tirado o, peor aún, sufrir un accidente. Con el mantenimiento de la moto, ¡no te la juegues!

¿Qué componentes de la moto hay que revisar periódicamente?

Cuando un vehículo se utiliza diariamente o con mucha asiduidad, es lógico que sus componentes presenten un mayor desgaste. De ahí que la revisión de la moto cobre mayor importancia en estos casos. A continuación, detallamos qué componentes debes revisar con frecuencia para mantener tu moto siempre a punto. ¡Toma nota!

Neumáticos

Ya lo hemos comentado en otros artículos del blog: junto a frenos y suspensiones, los neumáticos de moto forman parte del denominado triángulo de seguridad activa. Y son el único nexo de unión entre la motocicleta y el asfalto. Por ello, es indispensable llevar a cabo estas revisiones con asiduidad:

  • Inspeccionar el estado general de los neumáticos (presencia de grietas, cortes, deformaciones o cuerpos extraños).
  • Comprobar la profundidad del dibujo de la banda de rodadura. Recuerda: según el Reglamento General de Vehículos, la profundidad mínima de las ranuras debe ser, al menos, de 1,6 mm.
  • Verificar la presión, a ser posible, en frío. Una presión inadecuada afecta a la adherencia, la estabilidad y el desgaste. Y puede ser motivo de accidente.

Frenos

Continuando con la revisión de la moto, es conveniente prestar atención a la maneta y el pedal de freno. En este sentido, si se detecta un tacto más blando (esponjoso) o duro de lo normal es recomendable:

  • Revisar el nivel y estado del líquido de frenos (algo que, por otra parte, tiene que hacerse con frecuencia).
  • Acudir a un taller especializado para que sus profesionales examinen los componentes del sistema de frenos de la moto.

Por cierto: en nuestro blog encontrarás una práctica guía sobre el mantenimiento del sistema de frenos de una moto, donde explicamos desde cómo revisar las pastillas de freno hasta la manera adecuada de limpiar las pinzas y los discos de freno.

Suspensiones

Y para completar el denominado triángulo de seguridad activa, es indispensable fijarse si la horquilla de la suspensión presenta alguna fuga de aceite y estar atento a cualquier irregularidad en el comportamiento de la amortiguación trasera. Unas suspensiones de moto en mal estado son un peligro, pues reducen tanto la estabilidad como la capacidad de frenada.

Cadena de transmisión

Continuando con la revisión de la moto, también conviene ser cuidadosos con la transmisión secundaria. Concretamente, si la misma es por correa. En ese caso, es recomendable comprobar que tiene una tensión adecuada y lubricarla periódicamente. De igual manera, los expertos aconsejan engrasarla después de conducir con lluvia.

Aceite del motor

Otro hábito que contribuye a circular con seguridad y prolongar la vida útil de una motocicleta es revisar el nivel de aceite. Para ello:

  • Coloca la moto en posición vertical y sobre un terreno plano.
  • Es preferible que el motor esté frío para que el lubricante se encuentre asentado en el cárter.
  • Localiza el visor de aceite (ojo de buey) o la varilla de medición.
  • Comprueba que el nivel esté entre las marcas de mínimo y máximo.
  • Si es necesario, añade aceite del mismo tipo recomendado por el fabricante.

Grupos ópticos

En muchas ocasiones, son los grandes olvidados en la revisión de una moto. Pero si esta última se conduce a diario, es imprescindible asegurarse de que todos los grupos ópticos (luces delanteras, traseras, de freno e intermitentes) funcionan correctamente. Algo que se puede hacer, por ejemplo, cuando se arranca el motor y se espera a que alcance una temperatura de funcionamiento óptima.

Ruidos

Por último, fijar la atención en los ruidos anómalos de una motocicleta o un scooter es otra forma eficaz de detectar problemas antes de que se agraven. Circular con la misma moto a diario facilita identificar esas irregularidades que, en no pocas ocasiones, son una señal temprana de avería. Entre los ruidos más comunes que conviene vigilar se encuentran los siguientes:

  • Ruidos metálicos al acelerar. Pueden proceder del variador o la correa de transmisión (en scooters automáticos) o de una cadena de transmisión seca o mal tensada en motos convencionales.
  • Chirridos o silbidos al frenar. Suelen estar relacionados bien con pastillas de freno gastadas, bien con suciedad o humedad en los discos de freno. Asimismo, podría deberse a un deficiente montaje o a que las pastillas no asientan correctamente.
  • Golpeteos al pasar por baches o al frenar. Están relacionados con holguras en la suspensión, los ejes de las ruedas y los anclajes del motor.
  • Zumbidos o vibraciones. En los scooters, un zumbido constante al arrancar puede indicar desgaste en el embrague centrífugo. Y las vibraciones en las motos a veces son sinónimo de desajustes en el escape, el motor o los anclajes del chasis.

Por lo expuesto, tan importante es revisar los componentes de la moto como agudizar el oído para detectar ruidos extraños. Ante cualquier señal de desgaste, mal funcionamiento o anomalía, cuanto antes se acuda a un taller, menor será el coste de reparación y el riesgo de quedarse tirado o sufrir un accidente. ¡No lo olvides!

¿Cada cuánto revisar una moto?

Si circulas sobre dos ruedas a diario, las siguientes pautas te serán de ayuda para marcarte unos hábitos de revisión de la moto:

  • Revisión visual diaria. Estado de los neumáticos, la horquilla de la suspensión, la cadena y los grupos ópticos.
  • Revisión semanal. Nivel de aceite, tensión y lubricación de la cadena y estado de las pastillas de freno.
  • Revisión mensual. Presión de los neumáticos y niveles de líquidos.

En lo referente a las revisiones periódicas, nos ocupamos de ellas en nuestra guía dedicada al mantenimiento de la moto. Aquí conviene seguir las recomendaciones del fabricante y los consejos del mecánico encargado de la puesta a punto. Y si bien esta última varía en función del tipo de moto, a través de estas indicaciones podrás hacerte una idea de cada cuánto tiempo se tiene que llevar la moto a un taller:

  • Cambio de neumáticos. Si la profundidad del dibujo de la banda de rodadura es inferior a 1,6 mm o las cubiertas presentan alguna grieta, corte, abultamiento o anomalía que aconsejen reemplazarlos.
  • Sustitución de las pastillas de freno. Cada 15.000 o 20.000 kilómetros. En cuanto a los frenos de disco, lo determinará un profesional a tenor de su grosor.
  • Reemplazo del líquido de frenos. Una o dos veces al año, como máximo, dependiendo de su especificación (DOT 5.1 o DOT 4).
  • Cambio de aceite. Cuando se hayan recorrido entre 7.000 y 12.000 kilómetros.
  • Kit de transmisión. La cadena se debe limpiar y engrasar cada 500 kilómetros. Y ser tensada cuando sea necesario (normalmente, cada 2.000 kilómetros).
  • Líquido refrigerante. Conviene comprobar su estado y nivel antes de la entrada del invierno y del verano. Y de manera periódica, cada dos meses.

¿Por qué es importante revisar la presión de los neumáticos de tu motocicleta si la usas diario?

Como se ha comentado, en la revisión de la moto es primordial ser cuidadosos con los neumáticos y revisar su presión periódicamente. Y es que una correcta presión de las cubiertas se traduce en:

  • Una buena adherencia al asfalto.
  • Una respuesta más segura al trazar curvas y frenar.
  • Una mayor duración del neumático.
  • Un menor consumo de combustible.

¡Ojo! Circular con una presión baja aumenta el riesgo de sufrir un pinchazo y empeora el comportamiento de la moto. Por ello, es fundamental medirla, al menos, una vez al mes y, preferiblemente, con los neumáticos fríos.

¿Cómo afecta a la seguridad revisar los frenos de tu motocicleta?

Del mismo modo, un sistema de frenos en buen estado es crucial para evitar accidentes. De lo contrario, se producirán vibraciones y ruidos. Y, peor aún, se incrementará la distancia de frenado, con el peligro que eso conlleva para la seguridad vial.

¿Qué elementos eléctricos debes revisar en tu motocicleta si la usas a diario?

Si nos centramos en los componentes eléctricos, en la revisión de la moto se aconseja comprobar con frecuencia:

  • Grupos ópticos (luces cortas y largas, luz de freno e intermitentes).
  • Claxon.
  • Testigos e instrumentos del cuadro.
  • Batería.

Sobre esta última, en el blog te indicamos cómo evitar que se descargue la batería de tu moto. Para ello, te será de gran ayuda contar con un voltímetro, un mantenedor y un cargador. ¡No te pierdas nuestra guía!

¿Qué debes hacer si detectas que la cadena de tu motocicleta está floja cuando la usas diario?

Y en el supuesto de que la cadena esté floja, hay que tensarla cuanto antes. Ten en cuenta que una cadena floja puede salirse, golpear el basculante o provocar una pérdida de tracción repentina. Consejo: acude a un taller. Pero si tienes las herramientas indispensables para el mantenimiento de tu moto y eres un manitas, podrás tensar la cadena tú mismo siguiendo estos pasos:

  • Coloca la moto en el caballete central o sobre un elevador.
  • Localiza los tensores del eje trasero.
  • Ajusta la cadena dejando el margen de holgura recomendado (entre 2 y 3 cm).
  • Asegúrate de que el eje está alineado y aprieta los tornillos.

Después de tensarla, no olvides lubricarla adecuadamente. Y si está muy gastada, tocará cambiar la cadena, el piñón y la corona (todo el kit).

Tu seguro de moto, mejor con Asistencia en Viaje

Por todo lo expuesto, confiamos en que ahora tengas más claro qué es lo más importante en la revisión de una moto que se usa a diario o muy frecuentemente. Al poner en práctica una serie de hábitos, contribuirás a prevenir averías. Y en el caso de que sufras alguna, te vendrá bien tener un seguro de moto con cobertura de Asistencia en Viaje y servicio de grúa.

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Bernardo Valades - Autor de Noticias AMV

Soy un apasionado de las competiciones del motor y he trabajado y colaborado con algunos de los medios de comunicación más importantes de España, especializándome en este sector. Además, me interesan mucho los temas relacionados con la seguridad vial.

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