Formado por 49 países y con
38.000 kilómetros de costas, tiene una marcada influencia oceánica que determina su clima y rasgos físicos. Una espectacular combinación de terrenos macizos, islas y penínsulas hacen del continente europeo un destino obligado tanto para el “motero” veterano como para el aficionado.
Ya sean trayectos dentro de un país o de carácter transnacional, todos cumplen con creces los requisitos propios de una
“gran ruta”. Recorridos por parajes de escasa dificultad se combinan con vías plagadas de revueltas y vertiginosas curvas, lo que supone todo un reto y atractivo adicional para el “motero” consagrado.
* Oslo Cabo Norte (Noruega). Es una de las rutas más demandadas por los “moteros” de Europa. El recorrido puede realizarse solo por Noruega o extenderse hasta Suecia y parte de Finlandia. Para disfrutar de los fiordos, se debe circular por la famosa carretera del Atlántico, con puentes de perfecta ingeniería y maravillosos paisajes.
* Costa Amalfitana (Italia). Una famosísima ruta costera que discurre entre las poblaciones de Sorrento y Amalfi a través de la autovía 163, con el mar Tirreno como fondo. Con curvas muy pronunciadas y espectaculares vistas, el recorrido pasa por inolvidables pueblos como Positano y su playa de arena negra o Ravello, lugar que inspiró a Wagner su obra Parsifal.
* Paso de San Bernardino (Suiza). Ruta situada en el extremo oriental de los Alpes Occidentales a 2.065 metros de altura, con interminables curvas y desniveles propios de una montaña rusa. La ruta incluye un túnel de 6,6 kilómetros de largo y un impresionante y variado paisaje con bosques de pinos y flores autóctonas.
* Ruta The Cat y Fiddle (Reino Unido). Traducida como “la carretera del gato y el violín”, une las ciudades de Buxton y Macclesfield en la región de los Mindlands, al este de Inglaterra. Recorrido muy popular entre los ¨moteros” veteranos y amantes del riesgo, es famosa por ser la más peligrosa del país, con temibles curvas y cambios de rasante de escasa visibilidad.
* Ruta de los Inmortales (Escocia). Una de las más emblemáticas rutas “moteras”, con carreteras bien asfaltadas rodeadas de lagos, en ocasiones de vía única. Recorre lugares emblemáticos como el Castillo de Balmoral y la histórica ciudad de Nessie, cuna del leyendario monstruo del lago Ness.
* Ruta de los Balcanes. Muy variada en cuanto a países recorridos y paisajes. Se puede limitar a la costa adriática, hasta llegar a la ciudad de Montenegro pasando por la turística ciudad de Bar, o hacerla desde el interior, cruzando la frontera de Bosnia-Herzegovina.
También puedes leer:
Rutas en moto: consejos para viajar seguro
