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Sistemas de retención infantil: todo lo que debes saber  


Publicado el 04/09/19

¿Sabías que el uso de sistemas de retención infantil reduce en un 90% la probabilidad de sufrir lesiones de cuello, cabeza y abdomen? Si tienes que llevar a tus hijos en el coche, te explicamos cómo son estos auténticos salvavidas. ¡Sigue leyendo!


A estas alturas del año, muchos padres comienzan a preparar el nuevo curso escolar. Es tiempo de ir comprando los libros, el uniforme, la ropa deportiva… Y también de pensar cómo llevar a los niños en coche al colegio con seguridad.

Pero, ¿qué dice la normativa al respecto? ¿Nos pueden multar si no la cumplimos? ¿Qué tipo de sistema de retención infantil es el más apropiado para nuestro hijo? ¿Y cómo debe colocarse? Si tienes que llevar a tus hijos en coche al colegio, a través del presente post intentamos despejar las dudas que puedas tener para que los peques viajen seguros. ¡Toma nota!

Los sistemas de retención infantil, en las plazas traseras

Por si no lo sabías, en octubre de 2015 entró en vigor una nueva normativa sobre sistemas de retención infantil. Y la misma deja claro que los menores con una altura igual o inferior a 135 cm deben utilizar siempre un sistema de retención infantil homologado y adaptado a su peso y estatura. Además, los sistemas de retención infantil han de colocarse en los asientos traseros salvo:

·         Cuando el vehículo no tenga asientos traseros.

·         Cuando los asientos traseros del vehículo ya estén ocupados por otros menores con sistema de retención infantil.

·         Cuando no sea posible colocar todos los sistemas de retención infantil en los asientos traseros del vehículo.

Si nos vemos en la obligación de tener que utilizar el asiento del copiloto, tendremos que desactivar el airbag frontal si colocamos el sistema de retención infantil en sentido inverso a la marcha. En caso contrario, no es necesario desactivarlo.

¿Y qué sucede si viajamos con niños en un taxi?

Si viajamos con niños en un taxi, no es obligatorio que hagan uso de un sistema de retención infantil en los desplazamientos urbanos. Pero si deseamos que el trayecto sea seguro para el menor, lo aconsejable es llevar nuestro sistema de retención infantil y solicitar al taxista que lo instale en el vehículo.

En cuanto a los desplazamientos por carretera, sí es obligatorio que los niños utilicen un sistema de retención infantil cuando viajan en un taxi. Aquí tenemos dos opciones: aportarlo nosotros o solicitar el servicio de un taxi que cuente con sistemas de retención infantil homologados que se adapten a la estatura y el peso de los menores que vayan a viajar en él.

¿Nos pueden multar si no cumplimos la normativa?

Así es. La Ley sobre Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial lo deja bien claro: no hacer uso del cinturón de seguridad, los sistemas de retención infantil, el casco y demás elementos de protección se considera una infracción grave. Si no llevamos a los menores en un sistema de retención infantil, o utilizamos el asiento del copiloto para tal fin estando libres las plazas traseras, seremos sancionados con una multa de 200 euros y la retirada de 3 puntos del carnet de conducir. Asimismo, los agentes encargados de regular el tráfico podrían inmovilizar nuestro vehículo.

En el supuesto de que viajemos en taxi por carretera y no hagamos uso de los sistemas de retención infantil, la sanción no será para el taxista. Recaerá en nosotros como responsables de los menores. ¡No lo olvides!

¿Todos los sistemas de retención infantil son iguales?

Obviamente, no. Cuando vayamos a adquirir un sistema de retención infantil es preciso que tengamos en cuenta la edad del menor. Y, sobre todo, la estatura y el peso. De manera especial, estos dos últimos factores determinarán cuál es el sistema de retención infantil que más nos conviene.

Según recuerdan desde la Dirección General de Tráfico (DGT), en el mercado encontraremos los siguientes sistemas de retención infantil:

·         Grupos 0 y 0+. Especialmente indicados para recién nacidos y bebés de hasta 18 o 24 meses, deben utilizarse, siempre que se pueda, en sentido contrario a la marcha, ya que así brindan una mayor protección en cabeza, cuello y columna. Cuando el niño tenga un peso superior a 13 kilos, o su cabeza sobresalga del respaldo, se deberá cambiar de sistema de retención infantil.

·         Grupo I. Para niños con un peso de 9 a 18 kilos y edades de 1 a 4 años, este tipo de silla debe instalarse antes de sentar al bebé siguiendo las instrucciones del fabricante. Antes de iniciar la marcha se ha de comprobar que el pequeño queda bien sujeto y que no saca los brazos de los cinturones de seguridad del sistema de retención infantil.

·         Grupos II y III. Para menores con un peso de entre 15 y 36 kilos y edades de 4 a 12 años. Se trata de asientos y cojines elevadores. Son indicados para cuando el niño es demasiado grande para una silla y demasiado pequeño para usar el cinturón de seguridad del vehículo. La banda diagonal del cinturón de seguridad tiene que pasar por encima de la clavícula y sobre el hombro sin tocar el cuello. Y la banda horizontal, lo más abajo posible sobre las caderas y muslos. ¡Pero nunca sobre el estómago!

Excepcionalmente, recuerda la DGT, los menores de 12 años con una estatura igual o superior a 135 cm podrán utilizar los cinturones de seguridad del vehículo. Pero hasta los 150 cm es recomendable que continúen utilizando sistemas de retención infantil que se ajusten a su talla y peso.

¿Cómo se colocan los sistemas de retención infantil?

Básicamente, existen dos formas de colocar los sistemas de retención infantil en un vehículo:

·         Utilizando uno de los cinturones de seguridad del vehículo.

·         Mediante el sistema Isofix. Sin duda, es el más recomendado y seguro, ya que reduce la posibilidad de que el sistema de retención infantil se coloque de forma incorrecta.

¿Los sistemas de retención infantil deben estar homologados?

Lógicamente, los sistemas de retención infantil tienen que estar homologados para que sean realmente seguros. Y de ello se encargan dos normas: la ECE R44/04 y la i-SIZE. Tanto una como otra deben constar en el sistema de retención infantil a través de una etiqueta de color naranja en la que, entre otros datos, tiene que figurar el peso del niño.

Las seis reglas de oro de los sistemas de retención infantil

En definitiva, los sistemas de retención infantil nos ayudan a que nuestros peques viajen más seguros. No olvides poner en práctica estas seis reglas de oro que nos recomiendan desde la DGT:

1.      Utilizar siempre los sistemas de retención infantil desde que el bebé sale del hospital hasta que el niño mida 135 cm. Hasta que alcance una estatura de 150 cm es aconsejable que utilice una silla con respaldo antes de utilizar el cinturón de seguridad para adultos.

2.      Colocar el sistema de retención infantil el mayor tiempo posible en sentido contrario a la marcha. Los expertos recomiendan utilizar esta configuración hasta los 18 kilos o 105 cm de altura.

3.      Utilizar siempre el sistema de retención infantil adecuado a la altura y el peso del niño.

4.      Asegurarse de que el sistema de retención infantil está correctamente anclado al vehículo y que el niño va bien colocado y sujeto.

5.      No relajarse en los trayectos cortos. En este tipo de desplazamientos se registra el mayor número de accidentes y se producen más errores de colocación de los sistemas de retención infantil.

6.      Predicar con el ejemplo. Como adultos, somos los primeros que tenemos que ponernos el cinturón de seguridad.